Receta de nuestro pan bao

Su origen

El pan bao es un tipo de pan de origen chino que se caracteriza por su masa esponjosa y suave. Actualmente, es muy conocido a nivel mundial y es fácil encontrarlo en las cartas de todo tipo de restaurantes. Pero, ¿de dónde viene este pan? Su historia se remonta a más de mil años atrás en China. Aunque no se sepa con certeza cuál es su punto de inicio, aquí os dejamos algunos datos históricos relacionados con él:

  1. Dinastía Han (206 a.C. – 220 d.C.): Se cree que el pan bao tiene sus raíces en la Dinastía Han en China, que gobernó desde el 206 a.C. hasta el 220 d.C. Durante este período, se documenta el uso de la levadura para fermentar la masa del pan, lo que podría haber sido el comienzo de la técnica utilizada en la elaboración del pan bao.
  2. Dinastía Tang (618 – 907 d.C.): Durante la Dinastía Tang, que abarcó desde el 618 hasta el 907 d.C., el consumo de panes al vapor, incluido el pan bao, se volvió más común en China. En esta época, el pan bao se convirtió en una parte importante de la dieta china y comenzó a desarrollar su variedad de rellenos.
  3. Siglo XIX: Expansión internacional: A partir del siglo XIX, con la inmigración china a diferentes partes del mundo, el pan bao se introdujo en otros países y comenzó a ganar popularidad fuera de China. Esto llevó a adaptaciones regionales y a la creación de nuevas variedades de rellenos para satisfacer los gustos locales.
  4. Siglo XXI: Popularidad global: En el siglo XXI, el pan bao ha alcanzado una popularidad global y se puede encontrar en restaurantes asiáticos y establecimientos de comida callejera en todo el mundo. Ha sido reinterpretado en diversas culturas culinarias, pero aún conserva su esencia y técnica de cocción al vapor que lo hacen único.

Estos datos históricos proporcionan una visión general de cómo el pan bao ha evolucionado a lo largo de los siglos, desde sus humildes orígenes en la antigua China hasta convertirse en un plato popular a nivel internacional en la actualidad.

Dicho esto, si te ha picado el gusanillo de probar a hacerlo en casa, aquí te dejamos la receta:

Ingredientes:

  • Harina: 560g
  • Agua fría: 370g
  • Levadura fresca: 12,5g
  • Impulsor químico: 8g
  • Mantequilla: 50g
  • Sal: 4g
  • Azúcar: 20g
  • Leche en polvo: 40g

Proceso:

  1. Antes de comenzar, «activaremos» la levadura fresca. Calentaremos una pequeña parte del agua de la receta a unos 37ºC y disolveremos la levadura en ella. Reservamos para después.
  2. Empezamos tamizando la harina y añadiendo los ingredientes secos a un bol (harina, impulsor químico, sal, azúcar y leche en polvo).
  3. Mezclamos gradualmente los ingredientes secos con la mantequilla cortada en dados pequeños. Es importante que esté fría para evitar que la temperatura de la masa aumente durante el amasado.
  4. Añadimos el agua fría y continuamos trabajando la masa.
  5. Finalmente, incorporamos la levadura fresca ya activada y amasamos hasta que la mezcla quede uniforme.

Una vez llegado a este punto, taparemos nuestra mezcla y la dejaremos reposar en la nevera durante una hora y media.

  • Pasado este tiempo, formaremos bolas de entre 30 y 40g.
  • Fermentaremos esta vez fuera de la nevera durante otra hora y media como mínimo. Este paso depende mucho de la temperatura y humedad del ambiente, por lo que habrá que estar atentos.
  • Cuando la masa haya aumentado de tamaño, la llevamos al horno a 90ºC durante 20 minutos con un 20% de humedad.

A partir de aquí, ya tendrás tus baos listos que puedes guardar en la nevera para usarlos cuando te apetezca (también se congelan muy bien).

Para regenerarlos, basta con cocerlos al vapor durante 4 minutos ¡y a disfrutar!

Para ver el paso a paso, aquí te dejamos la publicación del proceso en nuestro perfil de Instagram: